Llegar a realizar un diagnóstico clínico completo de un paciente es uno de los fundamentos más importantes que puede aprender un estudiante de Medicina y no resulta tan fácil como relacionar una lista de síntomas con una afección o enfermedad. Es por eso por lo que a continuación te ofrecemos algunos consejos clave a tener en cuenta.
1. Escuchar las dolencias del paciente
Esta es, sin duda alguna, la piedra angular del proceso de diagnóstico clínico, la razón clave por la que el paciente busca ayuda médica. A veces resulta sencillo pero el ser humano es complejo. Así que, como profesional médico, lo ideal es que explores las ideas del paciente, preocupaciones y expectativas.
2. Escuchar el historial médico para crear un diagnóstico clínico
El pasado, a veces, puede señalar al presente. Esto puede ayudar a descartar una posibilidad. Por ejemplo, un paciente con dolor en el cuadrante inferior derecho del abdomen no puede tener apendicitis si el apéndice ya ha sido extirpado.
3. Escuchar el historial de medicamentos
Según el Instituto Nacional para la Excelencia en Salud y Clínica (NICE) del Reino Unido, se calcula que entre el 6 y el 7% de los ingresos hospitalarios se deben a relaciones adversas a los medicamentos. Como estas no se notifican, es probable que sea incluso más, esto no incluye los efectos secundarios esperados de la medicación.
4. Escuchar a los cuidadores para crear el diagnóstico clínico
Los cuidadores tendrán una visión inestimable de los problemas del paciente y de su comportamiento. Son indispensables cuando se trata de ciertas presentaciones, como los desmayos, en los que es esencial el relato de un testigo presencial, o si el paciente tiene mala memoria por razones como la demencia o el delirio.
5. Escuchar a los profesionales de la salud para crear el diagnóstico clínico
Bien sean enfermeros, auxiliares, terapeutas o cualquier persona que haya estado en contacto con su paciente. Las personas varían en la forma de informar sobre los signos y síntomas. Algunos exageran, otros restan importancia a sus síntomas y otros aciertan de pleno. Desafortunadamente, no se sabe siempre en qué campos se encuentran. En cambio, un profesional de la salud debería ser capaz de registrar de forma desapasionada y precisa cualquier signo o síntoma para ayudarle en su búsqueda de un diagnóstico clínico.