Las manos no solo son una parte de la estructura física de agarre mecánico de nuestro cuerpo, ya que, sin ellas no podríamos tocar, sentir, manipular, acariciar, escribir o pintar. Por tanto, debemos de cuidarlas, aplicando estrictas normas de higiene, hidratando y protegiendo la piel contra los nocivos rayos del sol y los factores dañinos del medio ambiente. Pero también, es importante cuidar la salud de las manos, previniendo el desgaste, dolor, debilitamiento de movilidad o molestias, causadas por el uso diario.

Concientizar sobre la importancia de las manos

¿Cuánto cuidamos nuestras manos? ¿Cuánto las utilizamos diariamente? Son preguntas que nos debemos plantear con miras a valorar lo que hacen por nosotros y no esperar hasta sentir molestias en ellas para consentirlas, ya que, son de suma importancia para realizar actividades cotidianas y generar bienestar.

De igual manera, es importante destacar que la mano es el último eslabón en una compleja interconexión, porque necesita del hombro, brazo, codo, antebrazo y muñeca para cumplir con sus funciones. Aunque, sin la orden sensorial del cerebro tampoco sería posible mantener la posición correcta o fraccionar el movimiento.

Esto quiere decir, que para cuidar la mano también debemos atender otras estructuras, entre las cuales también están los tendones, ligamentos y articulaciones, que se ven afectadas por los movimientos repetitivos, el exceso de uso o lesiones esporádicas, que al paso del tiempo van debilitando su funcionalidad y llegan a causar dolor, incomodidad o problemas de más gravedad como artritis o lesiones del túnel carpiano.

1. Limpieza e hidratación. Es el primer paso para cuidar nuestras manos. Por tanto, debemos utilizar productos poco agresivos que tengan el % adecuado de alcohol, aunque sería mucho mejor buscar siempre limpiar con agua y jabón con pH bajo. Además, para mantener la piel suave y saludable es importante usar cremas con ingredientes a base de aceites.
2. Protección solar. Los protectores solares, no solo se utilizan en el rostro, ya que, las manos y el resto del cuerpo, también están expuestos continuamente a los rayos que produce el sol, las lámparas y las pantallas de los aparatos electrónicos, envejeciendo la piel y aumentando el riesgo de desarrollar patologías cutáneas.
3. El estiramiento de todo el cuerpo es importante para descansar de las actividades cotidianas. Sin embargo, masajear las manos desde la periferia hacia el codo aplicando un poco de presión, contribuye a disminuir la inflamación y facilita la movilidad en los dedos. Igualmente juntar la parte exterior de las dos manos, alternándola con la parte interna, también favorece la movilidad.
4. Activar la circulación. Existen algunos trastornos como La debilidad de las uñas, la piel reseca, los calambres, la perdida de sensibilidad y la inflamación en las manos, que pueden ser causadas por falta de suficiente irrigación sanguínea. Sin embargo, si se hacen baños alternos de agua caliente y fría, es posible prevenir, disminuir o erradicar esta afección.
5. Hábitos sanos. La alimentación consiente, la higiene postural, el ejercicio físico, hacer pausas activas y consultar al profesional de la salud, son recomendaciones que ayudan a conservar la salud integrar de las manos, para poder acariciar nuestra mascota, tomar el envase de la bebida preferida o simplemente colocarnos ese anillo que tanto nos gusta, sin sentir ninguna molestia.