La época de vacaciones, muchas veces nos obliga a descuidar los hábitos sanos a los cuales estamos acostumbrados. Más en estos momentos que nos enfrentamos a una crisis sanitaria que nos sugiere mantener un distanciamiento social, al igual que algunos protocolos de higiene, que se unen con el cambio de horario y no encontrarnos en nuestro entorno habitual. Sin embargo, existen formas de cuidar de la salud en este periodo de descanso, para que después no tengamos que enfrentarnos a consecuencias inesperadas y arrepentimientos, que nos arruinen la experiencia.

Desconectarnos de la cotidianidad con responsabilidad

Mantener en equilibrio entre la salud física y mental, es de vital importancia para lograr un desarrollo personal optimo, que se irradie tanto en el entorno familiar, laboral y social. Por eso, es indispensable buscar actividades de calidad, que permitan descansar del mundo digital, en un entorno de seguridad y tranquilidad, que no constituya una amenaza de salud por la concentración de personas, la inadecuada manipulación de alimentos o la falta de protocolos de bioseguridad.

1. Cumplir con las medidas de higiene. Es la primera recomendación para disfrutar de las vacaciones junto a un grupo reducido de familiares o amigos. Ya que, de esta manera estamos evitando adquirir virus y bacterias que nos obliguen a visitar el servicio médico. Además, mantener las manos limpias y cumplir con los horarios de piscina, playa y restaurante, siempre será una buena forma de cuidar la salud.
2. Proteger la piel. Es otra manera de cuidar la salud, ya que, No solo los rayos solares, sino también los mosquitos, dañan la piel y causan infecciones. Por tanto, los bloqueadores, repelentes, prendas de vestir como gorras, sombreros y sombrillas, deben estar incluidos en la maleta de viaje para utilizarlos todo el tiempo, pero principalmente a las horas donde el sol tiene mayor fuerza.
3. Cuide la alimentación. El consumo de productos de mar, se ha convertido en una de las principales causas de intoxicación en las zonas costeras, por ello es necesario adquirirlos frescos en lugares certificados. De igual manera los productos enlatados deben estar en perfectas condiciones y se debe verificar la vigencia. Así mismo, no es discutible que se debe adquirir agua de botellón, para mayor seguridad.
4. Moverse. Aunque a veces en vacaciones solo queremos dormir, una de las recomendaciones para conservar la salud es realizar actividad física, por lo menos durante 20 minutos, porque seguramente tu corazón, cerebro y el sistema músculo esquelético lo agradecerá. Por tanto, no es necesario ir al gimnasio o hacer rutinas limitantes, si no se quiere. Ya que, con tan solo caminar por la playa, nadar en la piscina, montar en bicicleta por la ciudad, será suficiente.
5. Mantener una actitud positiva. Es la forma más inteligente de conservar la salud en forma integral, no solo en vacaciones, sino en cualquier época de nuestra vida. Puesto que, de esta manera disfrutamos de las oportunidades que nos da la vida, vislumbrando el entorno de una mejor manera y haciendo una introspección hacia nuestro ser, agradeciendo lo que tenemos y llevando a cabo acciones que nos hagan más conscientes, proactivos, asertivos y felices, para obtener prosperidad y bienestar.