Como médicos, lo que impulsa en el día a día es brindar atención de alta calidad y mejorar los resultados clínicos de los pacientes. Por eso, la comunicación eficaz es de vital importancia para la práctica médica.

La importancia de la buena comunicación

De hecho, varias investigaciones han demostrado repetidamente que existe un vínculo claro entre lo bien que nos comunicamos y los resultados de los pacientes.

Por otro lado, se sabe que mientras exista una conexión y una mejor comunicación con el paciente, hay una mayor adherencia al tratamiento, menores tasas de readmisión, mejores tasas de mortalidad, menor riesgo de negligencia y menor costo por caso.

Ninguna otra área de conocimiento médico o habilidad técnica tiene un impacto mayor en los pacientes.

Beneficios para los médicos en su práctica diaria

Además de los importantes beneficios para el paciente, otras ventajas de una mejor comunicación con los pacientes incluyen una mayor satisfacción en el trabajo del médico. Una mayor participación en el mercado y reputación, y una reducción de los errores médicos y los eventos de seguridad del paciente. La mejor parte es que una mejor comunicación NO requiere más tiempo del médico ni costos adicionales.

5 consejos que te ayudarán a mejorar la comunicación con tus pacientes según Physicians Practice.

Crea un ritual de bienvenida

Los pacientes sacan su primera impresión de ti dentro de los primeros segundos de su cita, por lo que tener un ritual practicado es clave. Ese ritual podría incluir anunciar su entrada, sonreír y hacer contacto visual. Procede a dirigirte a tu paciente por su nombre, presentándose y ofreciéndole un apretón de manos u otro toque apropiado. Reconoce a todos los visitantes, siéntate si es posible y comienza la conversación con algo que no sea médico para establecer una buena relación.

Dales la atención que necesitan

En nuestro agitado entorno, estamos muy orientados a las tareas. Caminamos con nuestras listas de tareas pendientes inundando nuestros cerebros. No es de extrañar que los pacientes a veces nos perciban como hablando con ellos en lugar de con ellos. Cuando practicamos el estar presente, animamos a nuestros pacientes a que se comprometan realmente con nosotros en ese momento. En consecuencia, la calidad general de la interacción es mejor y, a menudo, escuchamos las cosas de una manera diferente a cuando realizamos varias tareas al mismo tiempo

Usa palabras positivas

Haz un punto para mostrar su agradecimiento. Da las gracias, haz un cumplido o expresa tu agradecimiento a tus pacientes mientras atraviesan una experiencia potencialmente difícil y desafiante. Por ejemplo, “Gracias por venir hoy” o “Aprecio todo el esfuerzo que está invirtiendo en su recuperación”. Los pacientes a menudo no esperan gratitud, y eso hace que expresarla sea particularmente conmovedor.

Pon atención al lenguaje no verbal

Es más probable que las emociones y los sentimientos se transmitan y observen a través de la comunicación no verbal, por ejemplo, expresiones faciales, lagrimeo, movimientos de manos o golpeteo de pies. Si prestamos atención a la comunicación no verbal, aumentamos nuestra conciencia de qué mensajes enviamos a los demás y qué mensajes nos envían los demás. La investigación muestra que las acciones no verbales más importantes que ayudan a un paciente a sentirse conectado con su médico son el contacto visual y el tacto.

Siempre haz preguntas abiertas

Las preguntas abiertas provocan la historia del paciente. Eso puede incluir, “Dime qué pasó”, “Continúa” o “Ayúdame a entender”. Al comienzo de la visita, lanzamos una amplia red de preguntas abiertas para establecer una relación, crear un diálogo y recopilar información. A medida que comenzamos a comprender el problema o la inquietud, podemos pasar a preguntas cerradas para llenar los vacíos en nuestra comprensión y construir un diagnóstico diferencial.

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