Tus habilidades, tus destrezas y tu experiencia profesional son muy importantes a la hora de ofrecer tus servicios de salud, sin embargo, existe un ingrediente fundamental que ayudará a que tus pacientes te sean fieles por mucho tiempo, ¡ser carismático!
La clave está en el carisma
Pocos profesionales de la salud lo saben, pero el carisma es muy importante en el mundo de los negocios, pues mientras más te involucres con tus pacientes, más confianza sentirán ellos hacia ti.
El carisma es una condición que se contagia con facilidad. Cuando trabajas estos sentimientos a diario, los médicos, las enfermeras, el personal administrativo y hasta tus pacientes estarán mejor motivados y te brindarán su confianza y apoyo.
Mira los siguientes consejos con los cuales podrás aplicar el carisma empresarial en tu consultorio:
Escucha y luego habla
- Cuando escuchas los problemas de tus pacientes, descubrirás que es más fácil entablar una buena relación con ellos.
Reconoce el esfuerzo de los demás
- Cuando alguien realice un trabajo bien hecho, reconoce su esfuerzo y dedicación. Estas acciones dejarán ver en ti a un médico que se preocupa por los demás.
Haz tu ego a un lado
- No importa si perteneces a varias asociaciones médicas importantes o si haz publicado muchos artículos en revistas especializadas, pues la presunción no te llevará muy lejos. Utiliza tus conocimientos para ayudar a tus pacientes y a tus empleados para que alcancen sus objetivos en conjunto.
Piensa antes de hablar
- Antes de hablar, piensa bien lo que vas a decir. Tus palabras pueden hacer sentir mal a alguien, pero también pueden inspirar.
Acepta tus errores
- Cuando admites que te has equivocado en algo, la gente cercana a ti te verá como un verdadero líder y por lo tanto se sentirá identificada contigo.