A través de un comunicado, la Federal Drug Administration de Estados Unidos, informó que alrededor de 465 mil marcapasos construidos por la empresa Abbott Laboratories tendrán que ser reparados por fallas de seguridad en su software.
Como suele ocurrir frecuentemente con estos dispositivos, el software suele contener algunas vulnerabilidades que pueden afectar el funcionamiento del marcapasos, provocando que la batería se termine antes de lo que debiera.
De acuerdo con la FDA, se descubrieron tres vulnerabilidades en los marcapasos de Abbott. El primero de ellos permite a un atacante emitir comandos no autorizados por medio de radiofrecuencia (el mecanismo que estos marcapasos usan para ser programados inalámbricamente).
La segunda vulnerabilidad permite a un hacker activar la antena de transmisión de radio frecuencia del marcapasos las veces que él quiera. Cuando el ataque se realiza varias veces, la batería se puede agotar mucho antes de lo debido.
La tercera vulnerabilidad permite que el atacante acceda a información personal del paciente disponible en el marcapasos.
Por fortuna, la FDA informó que para reparar estas fallas en los marcapasos, los pacientes no requerirán una cirugía, sino que solamente será necesario reprogramar inalámbricamente los dispositivos.