Cuando se trata de gestionar una empresa de salud, muchos médicos ponen en segundo plano todas aquellas cosas que no están relacionadas directamente con la salud.
Los profesionales de la salud a veces olvidan que, al igual que un diagnóstico preciso o un buen tratamiento, una recepción organizada y una sala de espera cómoda ayudan a que el paciente se sienta en confianza.
Si no quieres que la competencia te lleve ventaja, lee las siguientes recomendaciones:
- Da tranquilidad. Como profesional de la salud, ten actitud de tranquilizar a tus pacientes a través de tus palabras, quienes con seguridad estarán atentos a tus consejos. Refleja confianza en tus mensaje, sé concreto e infunde seguridad a tus pacientes para que sepan que se encuentran en buenas manos y que no hay otra mejor opción que tú.
- Pregunta en qué fallaste. La comunicación con tus pacientes es básica. Si notas que no regresan a tu consultorio a pesar de la recomendación médica que les hiciste, entonces háblales por teléfono y pregúntales la razón por la que no han vuelto. Para evitar este tipo de contratiempos, es recomendable que realices una encuesta de satisfacción para que sepas qué es lo que más les gusta de tu clínica, si el servicio que recibieron fue de su absoluta satisfacción o si debes mejorar en algo. Cuando obtengas esta información, cambia lo que debas modificar para beneficio de tu clínica.
- Ofrece bienestar. Cuando se trata de la salud, la garantía del bienestar físico no es cosa segura, pero al menos trata que tus pacientes se sientan bien en las instalaciones de tu empresa de salud. Ofréceles un snack, incorpora un servicio de cafetería, coloca pantallas de televisión, pon música ambiental relajante, etc.
- Reduce tus precios. Esta estrategia debería ser lo último que hagas para atraer más pacientes ya que podrías afectar la rentabilidad de tu consultorio. Si lo haces, procura hacerlo de forma temporal u ofrece promociones ocasionales.