La ansiedad ante la consulta odontológica, se convierte en un reto para los profesionales de la salud oral y un riesgo para los pacientes. Sobre todo, porque esto puede generar un impacto negativo en los tratamientos, tomando más tiempo del necesario, incrementando los costos, aumentando la prevalencia de complicaciones y dilatando la asistencia a la consulta.
La fobia dental complica los tratamientos
El miedo excesivo o desproporcionado ante la consulta odontológica, es más común de los que pensamos. Ya que, según algunos estudios los contextos ansiógenos más habituales son los que incluyen jeringas, agujas y extracción de piezas, creando una interferencia en el procedimiento y afectando directamente la relación odontólogo- paciente.1
- Las experiencias medicas anteriores. Es una de las principales razones por las que tanto niños como adultos pueden presentar cuadros de ansiedad ante una visita odontológica. Especialmente porque esta vulnerabilidad psicológica se manifiesta más expresamente cuando han tenido que pasar por eventos traumáticos que impliquen hospitalización o cirugía.
- Enfrentarse a lo desconocido. Se convierte en un desafío para el paciente, que desea evitar a toda costa, específicamente cuando lo relaciona con heridas, dolor y sangre. Así mismo, se presenta una fragilidad de característica biológica, donde se crea un miedo a contraer enfermedades o ser víctima de contagio a través de los instrumentos utilizados en la cita.
- Inestabilidad emocional. Es una característica de la personalidad que se convierte en un punto focal al asistir a un tratamiento de salud oral. Debido principalmente a que el paciente trae consigo síntomas de neuroticismo que incluyen inseguridad, preocupación, ansiedad y tensión, que conjuntamente con el entorno del consultorio se convierten en factores de riesgo.
- Miedo referido. Es una de las razones más arraigadas en los infantes, que pueden arrastrar o aumentar hasta la edad adulta. Ya que, el concepto de los padres y cuidadores con respecto a la experiencia en el consultorio odontológica, marca un precedente de importancia en el ideario mental. Desencadenando pensamientos de tranquilidad o angustia preconcebidos ante la consulta.
Los pacientes ansiosos dificultan los procedimientos de salud oral, por tanto, es necesario identificarlos y poner en práctica las medidas apropiadas. Que deben incluir tiempo suficiente en la consulta, minimizar los factores provocadores, utilizar aromatizantes que reduzcan el aroma clínico y usar técnicas de distracción como música relajante.
De esta misma manera, es necesario seguir de cerca el proceso y evidenciar si es necesario utilizar anestésicos tópicos o medicación enfocada a relajar. Así mismo como determinar la importancia de referir al paciente a un especialista de comportamiento o psicólogo, que planearan un protocolo para el manejo de la ansiedad con terapias y/o fármacos.
Las razones de la ansiedad ante la consulta odontológica son muy variadas y dependen de la edad, las experiencias vividas y procesos físicos y psicológicos individuales. Por tanto, el profesional oral debe de establecer un manejo interdisciplinario, que debe dar inicio con una comunicación asertiva que fortalezca la relación con el paciente, seguido de técnicas y recomendaciones que faciliten el óptimo mantenimiento de la salud oral.
Referencia:
- 1. Hmud R, Walsh LJ. Revista de mínima intervención en odontología. Se puede consultar en: https://www.miseeq.com/s-2-1-8.pdf.