La retirada del pañal es un momento clave en la vida de cualquier bebé y es por eso por lo que no puede ser una decisión impuesta por el adulto. Solo el niño será capaz de controlar su esfínter. Eso sí, como padre y/o madre, tu acompañamiento será clave aunque nunca será un proceso que debes forzar o imponer.
Si te encuentras en este momento de la etapa de tu bebé, a continuación te vamos a exponer algunos de los errores que, como padres, solemos cometer a la hora de quitarles el pañal. ¡Toma nota para aprender de ellos!
Pensar que la retirada del pañal no se realiza de noche
Por la noche, el control de esfínteres funciona de forma diferente, es una cuestión de maduración cerebral. Cuando tu hijo está profundamente dormido, no tiene control, por lo que es imposible que los controle de un día para otro. A veces, la retirada del pañal de día es un éxito pero pueden pasar días, meses o años hasta que deje de mojar el pañal nocturno.
Creer que no va a tener ningún escape
Los escapes de pis o caca son normales en los primeros días de aprendizaje. No hay que catalogar esto como algo malo y castigar al niño. Ten en cuenta que, con la retirada del pañal, está aprendiendo a controlar los esfínteres, esa aprendiendo a detectar la necesidad de hacer pis o caca. Así que va a tener que experimentar lo que significa estar mojado o que se le escape el pis.
Etiquetarle durante el proceso de retirada del pañal
Mientras el niño aprende solemos soltar frases del tipo “eres un vago”, “pareces un bebé” o “eres un marrano”. Estas se deben evitar ya que los accidentes no son malos ni son motivo para enfadarse ni reñir porque toman parte del aprendizaje. Vigila mucho el vocabulario que uses también cuando hables con otras familias del proceso si tu hijo está delante.
Utilizar pañales de día por tu comodidad
Mientras el niño está aprendiendo, se va a hacer pis y se va a mojar. Si por nuestra propia comodidad, incorporamos pañales a ratos durante el día para hacer pis, estarás confundiendo a tu hijo, porque al absorber el pis no consiguen notar la sensación.
Para la retirada del pañal, es importante estar en un buen momento emocional y familiar para acompañar a vuestro hijo, con empatía y sin prisas. Si por cualquier motivo, no estáis en un buen momento para dedicar tiempo a vuestro peque, será mejor posponerlos unos días o semanas.