Las terapias endovenosas se convirtieron en una manera directa de alimentar, nutrir y restaurar nuestro cuerpo. En razón de que, gran cantidad de vitaminas, minerales y antioxidantes que consumimos en las comidas y bebidas, que hacen parte de la dieta diaria, no llegan al torrente sanguíneo, donde biológicamente son más efectivas. Por tanto, se ha buscado obviar los efectos adversos de los tratamientos orales llevando la dosis correcta de oligoelementos a la sangre.
Coctel de vitaminas que cuida la salud
El esquema clínico de sales y agua, utilizado para alimentar los tejidos y evitar la deshidratación, se ha reinventado. Agregando nuevos componentes como vitamina C, para reforzar el sistema inmunológico. Además, de aminoácidos, antioxidantes y otros agentes nutricionales, dosificados de acuerdo a las necesidades puntuales de cada paciente.
Las terapias endovenosas, mejoran la eficiencia terapéutica para la cual se está usando. Puesto que, acelera la efectividad de la suplementación, evitando perdidas de absorción. Así mismo, evade los problemas digestivos, que se presentan en muchos casos por la prescripción oral de medicamentos.
Nutrientes que mejoran la calidad de vida
Las investigaciones y avances científicos, han permitido que los profesionales de la salud y los terapeutas encuentren nuevas técnicas para prevenir y paliar patologías. Afortunadamente, han surgido terapias alternativas, donde la endovenosa ha tenido mucho éxito. Y aunque, aún sus efectos curativos son materia de estudio, si es claro, que es una forma fortalecer y vigorizar el organismo, (SciElo, 2018).
- Minimiza el riesgo de contraer enfermedades. Visto que, robustece el sistema inmune evitando la formación de agentes cancerígenos, disminuye el riesgo de contraer alergias y acortando el tiempo requerido para una recuperación, en caso de una intervención quirúrgica, Así mismo, forma un escudo protector que contraataca los gérmenes y virus, que debilitan el sistema respiratorio.
- Retarda el envejecimiento celular. Gracias a que, los diferentes oligoelementos y micronutrientes que lo componen, desintoxican y limpian las toxinas de los órganos, permitiendo que se dé una regeneración de tejidos. De igual manera, ayuda en los métodos de reducción de peso, minimiza los dolores asociados a diferentes patologías, oxigena la sangre y optimiza el proceso metabólico.
- Reduce las alteraciones nerviosas. Debido a que, promueve la formación de neurotransmisores encargados de controlar el estrés, la depresión y la agresividad. Igualmente, las terapias endovenosas se convierten en un poderoso antioxidante que mejora la memoria, la concentración y disminuye el cansancio, tanto físico como mental. Disminuyendo el riesgo de desarrollar enfermedades neurodegenerativas e infecciones.
- Es un método personalizado. Ya que, se integran los ingredientes necesarios de acuerdo a las necesidades del paciente. Porque es posible crear sueros de todo tipo, que van desde mejorar la energía, belleza de la piel, fortalecimiento del cabello y bienestar general, hasta aumentar el flujo sanguíneo para optimizar la libido y el desempeño sexual. De igual forma se usa para equilibrar enfermedades graves como el cáncer. (Latasiewicz, s.f.)
Los beneficios de las terapias endovenosas son amplios y deben ir acompañados por la orientación de un profesional de la salud. Sobre todo, porque este método busca vigorizar el organismo, aplicando los elementos de acuerdo a un diagnóstico previo dado por exámenes diagnósticos y otros tratamientos. Buscando prevenir, controlar y paliar deficiencias vitamínicas, patologías adquiridas y enfermedades de difícil pronóstico.