Los niños de 0 a 6 años, pasan por un proceso de crecimiento y desarrollo, donde fuera de fortalecer sus órganos y la estructura ósea, el cerebro también se está formando. Es aquí, donde la estimulación temprana, aprovecha la plasticidad cerebral para impulsar el desarrollo cognitivo, social y emocional del niño. Aplicando técnicas lúdicas, donde se aprende jugando, para potencializar las capacidades.
Además, de esta forma se logra evaluar a corta edad algún tipo de déficit, ya sea intelectual o motor, llegando a corregir o compensar; para que no se vea truncado su desarrollo personal. A la vez que, se promueve el interés por aprender, socializar y comunicarse, de una manera diferente, donde la parte física y mental están en equilibrio.
La estimulación temprana mejora las competencias
- De hecho, la estimulación temprana aplica procesos educativos basados en principios de la neurología, la psicología y la pedagogía, buscando entrenar y estimular el cerebro. De forma, que los niños desarrollen habilidades en áreas como la lecto escritura, matemáticas y lenguas. Pero, también mejoren la capacidad de resiliencia, asertividad y pensamiento creativo, muy útiles para tomar decisiones y llevar a cabo todo lo que se propongan en la vida.1
- Es así, como la estimulación temprana, además facilita el desarrollo psicomotor en los niños, permitiendo el movimiento y la interacción con su entorno. De ahí, que los niños a través de actividades lúdicas logren fortalecer los huesos y músculos, permitiendo que en los primeros meses puedan sostener la cabeza, pero en menos de un año puedan dar los primeros pasos y empezar a asumir una postura correcta.2
- Igualmente, ayudas como los audiolibros, la lectura de cuentos y las películas infantiles, harán que el desarrollo del lenguaje y la comunicación sea más fluido. Sobre todo, porque a través de la repetición se estimula el habla y la escucha. Lo que hace que el infante a corta edad pueda juntar palabras, comprender, memorizar y expresar sus pensamientos con facilidad. Facilitando el aprendizaje de cualquier idioma.3
- A la par, la estimulación temprana, trabaja el desarrollo afectivo y emocional. Ya que, de esta manera, él bebe empezara a distinguir, expresar y canalizar, los sentimientos y sus reacciones frente a la alegría, tristeza, enojo o frustración. Así, se forjará paulatinamente un adulto independiente, que mide los riesgos y toma decisiones en forma acertada frente a las circunstancias que le plantea el día a día.
En Resumen
Se observa, que la estimulación temprana se puede aplicar desde el momento del nacimiento, involucrando principalmente a los padres y cuidadores. Sobre todo, porque con la orientación del pediatra y la gran oferta de libros que se encuentran disponibles en el mercado, se pueden aprender técnicas sencillas que potencializan las capacidades intelectuales y las habilidades del niño.
Así mismo, el sector educativo dándole la importancia al progreso infantil, ha creado centros de educación infantil y estimulación temprana. Donde, personal experto aplican técnicas como pintura, danza, música y natación, para mejorar el desarrollo psicomotor. Además de facilitar la creatividad, el lenguaje y las capacidades intelectuales y sociales. Pero a su vez, se detectan alteraciones del lenguaje o motoras, que en la mayoría de los casos pueden corregir.
Referencias:
1.Domínguez Dieppa Fernando. Neurodesarrollo y estimulación temprana. Rev. Cubana Pediatr [Internet]. 2019 Jun [citado 2021 Jul 06]; 91(2): e819. Disponible en:
http://scielo.sld.cu/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S0034-75312019000200001&lng=es.
2.Rafael Pérez-Escamilla, Antonio Rizzoli-Córdoba, Aranzazú Alonso-Cuevas, Hortensia Reyes-Morales. Avances en el desarrollo infantil temprano: desde neuronas hasta programas a gran escala. Bolet. Hosp. Infan. Mex. [internet]2017 [ consultado 6 jul 2021];74(2);86-97. Disponible en:
https://www.sciencedirect.com/science/article/pii/S1665114616301617.
3.Alejandro medina salas. Estimulación temprana. Rev. Mex. Medic. Fis. Rehab. [internet] 2002 [Consultado 6 jul 2021];14: 63-64. Disponible en:
https://www.medigraphic.com/pdfs/fisica/mf-2002/mf02-2_4i.pdf.