Por desgracia las agresiones hacia los profesionales de la salud son cada vez más recurrentes, no sólo en nuestro país sino en el mundo entero, lo cual resulta inexplicable si se considera que la principal actividad de un galeno es atender los problemas de salud que presenten las personas que a diario acuden a una consulta.
Respecto a este tema, la sinergología afirma que existen ciertas características de la comunicación verbal, corporal y el comportamiento humano que permiten detectar con hasta 15 segundos de anticipación cuando una acción violenta se presentará. Por tal motivo es sumamente importante que conozcas dichas características para que puedas poner en práctica los siguientes consejos y así evitar convertirte en víctima de un paciente agresor dentro de tu consultorio.
Exceso de gesticulaciones
- Dentro del consultorio, al momento de realizar las preguntas al paciente, es necesario que observes con detenimiento lo que expresa y la forma en que lo expresa, pues te ayudará para identificar acciones poco habituales. Si observas que comienza a gesticular en demasía, procura tranquilizarlo, pues en caso contrario podría derivar en una agresión hacia tu persona.
Pérdida del control
- En la mayoría de los casos, las personas suelen perder el control antes de proceder a atacar a alguien. Por tal motivo debes de procurar evitar llegar a ese tipo de situaciones y en cuento detectes los primeros síntomas de que el paciente empiece a perder el control, debes buscar calmarlo y pedirle que se relaje.
Emociones negativas extremas
- De forma natural, todos los pacientes llegarán con alguna enfermedad o dolencia a tu consultorio médico; sin embargo, si observas que durante la consulta muestran una actitud negativa y no parecen querer cambiarla, es mejor que te evites problemas para que la situación no crezca y puedas llegar a ser víctima de una agresión.