De acuerdo con la más reciente evaluación elaborada por los especialistas de la Organización Mundial de la Salud (OMS), existen en el mundo un total de 285 millones de personas que presentan algún grado de discapacidad visual. Una cifra de las cual se desprenden 39 millones que padece ceguera.
13% de los discapacitados visuales padecen ceguera prevenible
Con esto en mente y tomando como referencia la información depositada en un artículo publicado por la cadena de noticias de Infobae, de los 285 millones de personas que padecen alguna discapacidad visual, 39 millones sufren de ceguera (en uno o dos ojos). Una relación que permite identificar que el 13 por ciento de los discapacitados visuales son ciegos.
No obstante, si se hace caso, nuevamente, a los tabuladores de la OMS, el 80 por ciento de los casos diagnósticados como ceguera se pudieron haber evitado, si se hubieran llevado a cabo:
- Un diagnóstico oportuno (precoz);
- Adecuado control de la patología; y,
- Un tratamiento personalizado.
Y, sin embargo, la vista puede regresar al paciente con ceguera
No obstante, de implementarse un adecuado tratamiento de medicina curativa, alguno de los más 39 millones de pacientes que sufren de ceguera a nivel mundial podrían recuperar su capacidad visual; al menos, parcialmente.
Así lo indica la doctora Perla Catherine Mayo, médica especialista y profesora de educación especial y rehabilitadora visual del Centro de Mayo de Baja Visión (CMBV), uno de los hospitales oftalmológicos más importantes que existen en la nación argentina.
Este tipo de tratamientos no es una cura pero sí se trata de una rehabilitación para optimizar y maximizar su resto visual y asegurar así, una mejor calidad de vida como también desarrollar su capacidad psicoemocional. El fin es no depender de otras personas como también poder lograr una interacción con el grupo familiar y social en general. Lo mismo ocurre con la incorporación del bastón verde, el cual cumple un rol fundamental de distinción e identidad. Todos estos procesos pueden ser un cambio significativo en la vida del paciente.
En México, la ceguera ocupa el segundo lugar entre las principales causas de discapacidad a nivel nacional. Por esa razón, la incorporación de terapias de rehabilitación y de identidad para mejorar la calidad de vida del paciente podrían representar una excelente alternativa para el médico encargado de la supervisión del tratamiento.
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