Si analizas con detenimiento a los pacientes que acuden a diario contigo tal vez notarás que uno de los problemas más recurrentes es la obesidad, condición que no sólo puede afectar en el autoestima de las personas sino que es un factor de riesgo para el desarrollo de enfermedades y padecimientos como cáncer, diabetes, hipertensión y afecciones cardiovasculares, por lo cual es muy importante ayudarlos para estabilizar su peso.
En ese sentido, para entender la manera en que este problema ha tenido un incremento exponencial no sólo en nuestro país sino en todo el mundo, la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) presentó el informe El estado de la seguridad alimentaria y la nutrición en el mundo 2018 en el que expuso que actualmente uno de cada 8 adultos en el planeta padece de obesidad.
La obesidad adulta está empeorando y eso ha provocado que en la actualidad uno de cada ocho adultos en el mundo sea obeso. Aunque en un inicio fue un problema que principalmente se manifestó en América y Europa, a lo largo de los últimos años hemos detectado que en Asia y África también se ha presentado una tendencia a la alza.
Al respecto, uno de los factores que ha propiciado este fenómeno es la alimentación deficiente de la población, además de que el trabajo afirma que alimentarse sano suele ser más caro y tardado, por lo cual la población ha optado por una dieta desbalanceada.
Finalmente, algo importante a considerar es que la obesidad no sólo afecta en la salud de las personas sino en las finanzas de los sistemas sanitarios, lo que se traduce en que tan sólo en nuestro país genera un gasto anual de 240 mil millones de pesos.
