No hace mucho tiempo, el equipo editorial de Saludiario documentó el caso de Ceri Jones, una paciente de origen inglés de 22 años de edad, quien luego de una visita con el odontólogo descubrió la presencia de un carcinoma adenoide quístico, un tumor que estaba localizado en las glándulas salivales y que le valió una reconstrucción de mandíbula como resultado de la operación.
El caso de Feng Xiaoxiao
Con esto en mente, ¿qué pasaría si se traslada esta situación a un paciente pediátrico? ¿Sería el mismo tratamiento? ¿Qué hay sobre la detección y el diagnóstico? Para responder a esta pregunta, el equipo de monitoreo de medios de esta publicación se encontró con el caso de Feng Xiaoxiao (psudónimo), un paciente de 10 años de edad que fue sometido a la primera cirugía completa de mandíbula que utilizó tecnología 3D para su diseño.
Un caso que no únicamente fue reconocido por los médicos en China, sino en todo el mundo debido a que es la primera ocasión que se documenta un suceso de esta naturaleza con éxito.
En este sentido, como se narra en la información publicada por El País, la cirugía fue llevada a cabo por un equipo de médicos y especialistas chinos, quienes lograron implantar con éxito una mandíbula fabricada con una impresora 3D a un niño de 10 años, lo que confirma las infinitas aplicaciones de una tecnología que permite reconstruir huesos con una precisión imposible de conseguir con los métodos tradicionales.
La intervención se produjo el pasado enero, pero no ha salido a la luz hasta tres meses después, una vez se ha confirmado que el paciente es capaz de hablar y comer con normalidad. Se trata de Feng Xiaoxiao (nombre bajo pséudonimo), un niño de 10 años que sufría una fractura en la parte inferior derecha de su mandíbula tras someterse a una cirugía que se le practicó con el objetivo extirparle un tumor. Como pasa en muchos de estos casos, el bulto fue extraído pero su maxilar inferior quedó dañado, lo que resultó en una deformación facial muy visible, dolores e incluso dificultades para comer y comunicarse.
¿Métodos de reconstrucción convencionales?
Sobre el caso, el Dr. Lai Qingguo, quien publicó su testimonio en la edición más reciente de la revista médica y científica Science and Technology Daily, detalló que el uso de la tecnología se basó en el problema era que los métodos de reconstrucción mandibular tradicionales, basados en el uso de injertos óseos revascularizados no servían para el pequeño Feng.
Con solamente diez años de edad, si no se reparaba la mandíbula dislocada había muchas posibilidades de que el paciente sufriera secuelas psicológicas el resto de su vida.
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