A fin de triunfar, el médico emprendedor debe desarrollar una mentalidad proactiva, para lo cual necesita ejercitar habilidades que le permitan reconocer sus sentimientos y valorarlos objetivamente para responder de modo adecuado ante la situación que se le presente.
Una buena forma de lograrlo es hacer uso de la inteligencia emocional para superar fracasos en el consultorio, ya que ésta ayuda a no suprimir emociones que pueden afectar la productividad.
Si tú eres de los médicos emprendedores que se la pasan obsesionados con los errores que han cometido en la administración de su consultorio y sientes que no te lo puedes perdonar, toma en cuenta estos consejos:
- Enfócate en el presente. Cuando el médico emprendedor se aferra a reprocharse por perder, por ejemplo, a uno de sus mejores proveedores o haber dejado escapar la oportunidad de asociarse con un buen prospecto, equivale a no perdonarse, a guardarse rencor que le impide concentrarse en proyectos futuros.
- Abre los ojos. Equivocarse es de humanos, así que si hay algún fracaso en el consultorio médico no significa que tú seas un fracasado. El éxito dentro del campo de la salud no se le garantiza a nadie, por tanto, si has tenido un tropiezo es hora de levantarse. Como profesional de la salud sabes que la parte emocional tiende a dominar a las personas cuando han tenido una caída; sin embargo, también sabes que, con un poco de reflexión, es posible que la parte racional tome el control de la situación.
- Siéntete mal y avanza. Como bien sabes, reprimir las emociones negativas puede ser contraproducente. Sentirse mal por un fracaso en el consultorio médico es natural. Date tiempo para reconocer tu malestar y experimentarlo, pero bajo ninguna circunstancia permitas que se apodere de ti, ya que el objetivo es procesar tus emociones y sentimientos para después afrontar la situación.
Médico emprendedor, usa la inteligencia emocional para superar tus fracasos. ¡Equivócate, aprende y avanza!